Hacer la maleta para un vuelo puede parecer sencillo al principio. Sin embargo, la diferencia entre un viaje tranquilo y uno estresante suele empezar en casa: con el equipaje. Tanto si vuelas por negocios como por placer, una preparación cuidadosa puede ahorrarte tiempo, dinero y molestias.
A continuación encontrarás consejos esenciales que te ayudarán a empaquetar tu equipaje de forma eficiente, respetar las normas de las compañías aéreas y viajar con tranquilidad.
1. Entiende la política de equipajes de la compañía aérea
Cada compañía aérea tiene sus propias normas de equipaje en cuanto a tamaño, peso y número de piezas permitidas. Es importante revisar estas directrices antes de hacer la maleta.
Muchas compañías internacionales permiten al menos una maleta facturada y un equipaje de mano, mientras que las compañías de bajo coste o regionales pueden cobrar un suplemento por cualquier equipaje que vaya más allá de un objeto personal.
Consejo útil: Utiliza una báscula digital de equipaje para pesar tus maletas en casa. Esta pequeña inversión te ayudará a evitar las tasas por exceso de equipaje y tener que volver a hacer las maletas en el mostrador de facturación.
2. Elige el equipaje adecuado
La elección de tu equipaje desempeña un papel importante en el proceso general de hacer la maleta. Selecciona una maleta o bolsa que sea ligera, duradera y del tamaño adecuado para tu viaje.
Las maletas rígidas protegen mejor los objetos frágiles, mientras que las blandas suelen ofrecer más flexibilidad para meter ese objeto extra.
Para las maletas de mano, asegúrate de que las dimensiones cumplen las normas de tu compañía aérea. Incluso unos pocos centímetros por encima del límite pueden hacer que tengas que facturar la maleta.
3. Haz una lista de equipaje
Crear una lista de comprobación para el equipaje puede ser una forma eficaz de mantenerse organizado y asegurarse de que no se olvida nada esencial.
Divide tu lista en categorías:
- Ropa
- Artículos de aseo
- Documentos de viaje
- Electrónica y cargadores
- Medicamentos
Tacha las cosas a medida que las empaquetas. Esto no sólo te ahorra tiempo, sino que también reduce el riesgo de empaquetar demasiado o de que te falte algo importante.
4. Haz la maleta según tu itinerario
Piensa con antelación en las actividades que vas a realizar en tu destino. Si tu viaje incluye cenas formales, senderismo o natación, haz la maleta en consecuencia, pero evita llevar cosas “por si acaso”.
Un error común al hacer la maleta es prepararse para todas las situaciones posibles. En lugar de eso, céntrate en ropa versátil que puedas mezclar y combinar.
Consejo útil: Enrollar la ropa en lugar de doblarla ahorra espacio y ayuda a evitar las arrugas.
5. Sé estratégico con tu equipaje de mano
Tu equipaje de mano debe incluir artículos que vayas a necesitar durante el vuelo, y cualquier cosa demasiado valiosa o importante como para arriesgarse a perderla.
Esto incluye
- Pasaporte o DNI
- Billetes de avión o tarjetas de embarque
- Medicamentos
- Artículos de aseo de viaje (líquidos de menos de 100 ml en una bolsa transparente con cierre)
- Electrónica y cargadores
- Una muda de ropa por si se retrasa tu equipaje facturado
- Documentos de viaje (confirmaciones de hotel, contactos de emergencia, etc.)
Mantén organizado tu equipaje de mano. Utiliza bolsas con cremallera o pequeños organizadores de viaje para mantener en orden cables, documentos y artículos de aseo.
6. Cumplir las normas de seguridad aeroportuaria
Los aeropuertos de todo el mundo siguen estrictas directrices de seguridad. Para pasar sin problemas los controles de seguridad:
- Saca de tu bolsa los ordenadores portátiles y los aparatos electrónicos grandes
- Asegúrate de que todos los líquidos y geles tengan menos de 100 ml y colócalos en una bolsa transparente con cremallera
- Evita llevar objetos afilados como tijeras o navajas en el equipaje de mano
- Lleva zapatos fáciles de quitar y accesorios metálicos mínimos
Estar preparado en el control de seguridad no sólo acelera el proceso para ti, sino que también ayuda a mantener las colas en movimiento para todos.
7. Mantén accesibles los objetos esenciales
Hay ciertos objetos que debes tener siempre al alcance de la mano, no enterrados en el fondo de la maleta. Entre ellos están:
- Tu pasaporte o DNI
- Tarjeta de embarque
- Cartera y dinero en efectivo o tarjeta de crédito
- Medicamentos con receta
- Gafas o lentillas
- Información de contacto en caso de emergencia
Si tu viaje implica varias conexiones, guarda también copias impresas de tus reservas de hotel o excursiones. Las copias digitales son cómodas, pero las copias de seguridad físicas son útiles en zonas con acceso limitado a Internet.
8. Protege los objetos frágiles y valiosos
Si llevas objetos frágiles, envuélvelos bien con ropa o plástico de burbujas. Colócalos en el centro de la maleta, acolchados por objetos más blandos a su alrededor.
Evita colocar objetos de valor en el equipaje facturado. Artículos como joyas, aparatos electrónicos y documentos personales deben viajar siempre en tu equipaje de mano.
Consejo útil: Si viajas con regalos, evita envolverlos antes de volar. Los agentes de seguridad pueden tener que inspeccionarlos durante el control.
9. Ten en cuenta el tiempo y las costumbres locales
Antes de hacer la maleta, consulta la previsión meteorológica de tu destino. Esto te ayudará a llevar la ropa adecuada y a evitar llevar cosas innecesarias.
Ten en cuenta también las costumbres locales. Algunos destinos pueden exigir un atuendo más modesto para los lugares religiosos o códigos de vestimenta formales para determinados lugares. Ser respetuoso y estar preparado mejora tu experiencia de viaje.
10. Ten en cuenta los artículos no permitidos en las maletas facturadas o de mano
Familiarízate con la lista de objetos prohibidos. Pueden incluir sustancias inflamables, aerosoles, pilas y determinados equipos deportivos.
Llevar artículos restringidos puede dar lugar a retrasos, confiscaciones o multas. Cada país tiene normas ligeramente diferentes, así que compruébalo siempre en los aeropuertos de salida y de destino.